Conmovedora y emotiva presentación en Madrid del documental ‘Invisibles. Te podría pasar a tí’
Cientos de personas sin hogar se vuelven diariamente “invisibles” ante nuestros ojos cuando paseamos por las calles más importantes de nuestras ciudades
El conmovedor documental centrado en los sentimientos de las personas sin hogar, da una gran bofetada de atención a una sociedad egoísta, que aparta de su mirada aquello que no le gusta o interesa y que no se para a pensar, que algún día podrían encontrarse ellos en esa situación.
Presentado el pasado 20 de octubre a las 20.30h en el céntrico Cine Callao de Madrid, por el cántabro afincado en la capital, Javier Castillo “Poty”, el documental dirigido por Daniel Landa y producido por Miguel Sierralta, está apoyado por el Ayuntamiento de Madrid, con la representación de la Vicealcaldesa Begoña Villacís, la Fundación Real Madrid representada por su embajador Álvaro Arbeloa y la Fundación Mensajeros por la Paz, abanderada por su fundador el Padre Ángel.
Todos ellos fueron aplaudidos al subir al escenario, aunque las ovaciones más emotivas fueron al aparecer dos de los protagonistas del documental. Uno de ellos que contó que sí se puede salir de la calle y como él lo había logrado, tras pasar de ser un conocido actor a perderlo todo, y otro acompañado de su inseparable perro, que nos recordó que ellos siguen siendo personas y que merecen un trato digno de respeto.
Aunque el documental está centrado en las personas sin hogar de Madrid, incluyendo testimonios reales de este colectivo, que se vuelve invisible ante gran parte de la sociedad, y de situaciones vividas por trabajadores sociales de diferentes entidades madrileñas, puede exportarse a otras grandes ciudades de nuestro país.
La cruda realidad
Vivir en la calle no es una elección, puede ser la consecuencia de una cadena de acontecimientos que le pueden suceder a cualquiera.
Una enfermedad te imposibilita trabajar y en consecuencia, pierdes el trabajo y al no tener ingresos, ni apoyos económicos familiares, pierdes la vivienda por impago de la hipoteca o del alquiler.
Un mal divorcio en el que te quedas sin nada y que termina con tu desesperación e impotencia al perderlo todo.
Una mala gestión de tu empresa que se acentúa por una inesperada pandemia, terminando por cerrar el negocio cargado de deudas.
Una enfermedad que te obliga a vender tu vivienda y bienes preciados, para pagar una operación en el extranjero o simplemente unos medicamentos excesivamente caros.
Historias reales de personas que lo perdieron todo, pasando de vivir cómodamente a tener que subsistir en la calle sin un techo que les proteja. Vidas que caen de golpe por el precipicio del bienestar social y terminan en la pobreza y el olvido.
La invisibilidad social
Estas personas habitan en las grandes ciudades, por las que diariamente transitamos, sin embargo, nos hemos vuelto una sociedad mayoritariamente egoísta y evitamos mirar hacia lo que nos disgusta o nos enseña lo realmente frágiles que somos como eslabón de la sociedad, y automáticamente, dejamos de percibir su presencia aunque nos los encontremos de frente, convirtiéndoles en seres invisibles.
La pérdida de la dignidad
Uno de los objetivos del documental es mostrar que estas personas caídas en desgracia, siguen siendo hombres y mujeres a los que les retiramos su dignidad al apartar nuestra mirada o al tratarlos con indiferencia.
Una vez perdidos tus bienes materiales, lo único que te queda es tu dignidad, la que te da fuerzas para seguir adelante y la que puede ayudarte a salir de esa situación, pero la mayor expresión de la pobreza es cuando te conviertes en alguien invisible e inexistente para los demás.
Tan solo con mirarles a los ojos al entregarles unas monedas, un bocadillo, un café caliente o simplemente preguntarles por su nombre o si necesitan algo, les devolvemos una dignidad que nunca debieron de perder.
Los problemas de vivir en la calle
Vivir en la calle es muy duro y nada fácil. Por el día quedan al amparo de las pequeñas ayudas que puedan recibir para poder comer algo y por las noches, han de protegerse de uno de sus peores enemigos, el frio.
Por si fuera poco, hay personas de alma oscura que se dedican a insultarles, orinarles e incluso robarles o agredirles, pero también hay personas con luz en el alma, que les ayudan con alimentos, comida y bebida caliente.
Si el día a día es complicado para ellos, más aún cuando olas de frio o pandemias arrasan sobre la población más débil.
La ayuda
La pandemia provocó un encierro total de la población en sus casas y sacó a la luz la existencia de personas con las vidas rotas, que no tenían un hogar donde refugiarse y mostrando que solo en Madrid había unas 3000 personas viviendo en la calle.
Los trabajadores sociales, muchos de ellos voluntarios, son los “héroes” en las sombras que han ayudado a estas personas con alimentos, medicinas, refugio y sobre todo, escuchándoles. Un trabajo que pasa desapercibido pero que devuelve la dignidad a estar personas que “hace unos días”, vivían cómodamente como tú.
También fundaciones como Mensajeros por la Paz o ayudas como la del ayuntamiento de Madrid ponen su grano de arena para que al menos, sepan que no están solos.
En resumen, el documental es una enorme bofetada social que no deja con indiferencia y que tal vez, la próxima vez que camines por la calle, abras los ojos y mires.