Gorka AGUINAGALDE
Gorka AGUINAGALDE
humor en vena
Actor, Humorista y Cantante, reconoce que el humor es su vida y que para hacer reír, primero hay que reírse de uno mismo. Siente una profunda pasión por el teatro, donde representa sus propios monólogos que escribe sobre temas que conoce y siente nervios al pisar el escenario, muestra de respecto al público. Sus pasiones son dibujar, hacer el payaso y el rock and roll, siendo componente del grupo “Del Gas”, aunque se considera un actor con oído. Versátil, acido y socarrón, así es este artista todoterreno.
Gorka Aguinagalde López nació el 7 de octubre de 1966 en Vitoria, capital de la provincia de Álava.
Comenzó sus estudios de interpretación en el Taller de Artes Escénicas (TAE) de Vitoria, donde se formó entre 1988 y 1990, año en el que realizó un curso de improvisación dirigido por Anton Font (creador de la Escuela de Teatro La Tarima) y otro de interpretación, impartido por Álex Angulo (actor de cine y televisión protagonista de películas como El Día de la Bestia y Muertos de Risa).
Continuó formándose en expresión corporal, acrobacia y como clown, hasta acceder a la escuela de teatro “El Tibal” de Barcelona… cuando en 1995 debuta en el cine con Action Painting.
CINE
Desde su aparición en AIRBAG, ha participado en películas como Muertos de Risa, Año Mariano, La Comunidad, El Palo, Gente Pez, Visionarios, El Robo más Grande Jamás Contado, Torapia, Frágil, Escuela de Seducción, El Síndrome de Svensson, Olé, La Buena Nueva, La Máquina de Pintar Nubes, Sukalde Kontuak, Mugaldekoak, Sabino, Fuga de Cerebros 2, La Conspiración, ¡Aupa Josu¡, Negociador, Bendita Calamidad y Rey Gitano.
TELEVISIÓN
Además de participar en numerosas series de la televisión vasca y programas de humor incluidos sketches para Paramount Comedy, ya sea como personaje fijo o recurrente, le hemos podido ver en El Comisario, Hermanos y Detectives, Aida, Los Hombres de Paco, Ciudad K, Dr. Mateo, Plaza España, Cuéntame como Pasó, Luna el Misterio de Calenda, B&B y actualmente como Dr. Incháustegui en la divertida comedia Allí Abajo.
TEATRO
Autor y director de sus propios monólogos, podemos contar entre otros Tatami, Bilbao Bilbao… El Musical, Cotillas, La Lechuga, El Regrueso de Patxi, A diestro y Siniestro, Cotillas en 3D, Monólogos Protestantes, Una Boda, un Bautizo y un Elefante y De Cuerpo Presente.
En estos tiempos que corren hay que diversificarse, conciertos, cine, teatro, monólogos… ¿Cuál consideras más difícil, con cual conectas más con el público y con cual te sientes más satisfecho y gratificado como persona?
Sí, claro que hay que diversificar, hoy en día es necesario. Antes había actores/actrices que se dedicaban exclusivamente al cine, al teatro o a la televisión, ya no, es necesario abrir el abanico. Por otra parte es enriquecedor, son medios distintos y, como actor, tienes que encararlos de manera diferente, para mí el cine es técnico, si no dices tú frase en tu marca no vale. La tele te pone las pilas, se improvisa mucho. El teatro te da la inmediatez, el público y tú, no hay segundas tomas. Los monólogos me los escribo yo, así que disfruto de libertad para decir lo que me de la gana…de momento ja,ja,ja… Los conciertos son mi vía de escape. Siempre he sido rockero.
¿Eres supersticioso? ¿Tienes algún ritual de preparación antes de un espectáculo para salir con energía y reducir la ansiedad?
No, sí que tengo alguna manía…pero no soy supersticioso. Antes de salir al escenario caliento cuerpo y voz, respiro, palpo el escenario, me concentro… y le giño un ojo a mi socio Ion Gabella, tristemente fallecido, que sigue pisando cada escenario conmigo.
Elaborar un personaje para cine y televisión o crear un monólogo ¿Cuál consideras más complicado y con cual disfrutas más?
Cada uno tiene su método a la hora de meterse en la piel de un personaje. Yo procuro jugar con la verdad, insuflar en cada personaje algo de mí, pero a la vez alejarlos de mis andares, maneras de coger los objetos…cada personaje tiene algo interesante, alguna peculiaridad que los distingue y con la que puedes jugar, no hay personajes pequeños, todos requieren atención, creo que es la manera de disfrutar con y de ellos. Al crear un monólogo el proceso es diferente ya que yo me los escribo, el monologuista juega más con el texto, el ritmo, los gags…
¿Qué haces si cuentas algún chiste en un monólogo y nadie se ríe? ¿Alguna vez te ha pasado? ¿Qué sientes cuando actúas en directo?
Jajajaja… ¡Tirar “palante” y esperar que entren en el siguiente!
Sí, me ha pasado, el público varía de un lugar a otro.
El escenario engancha. En mi caso me siento un privilegiado, mi trabajo es mi pasión y disfruto como un chiquillo.
El humor ayuda a disminuir el nivel de estrés, mejora la motivación y la comunicación, estimula la creatividad y el aprendizaje, favorece la socialización, eleva el estado de ánimo, fomenta la relajación, mejora la salud física, rejuvenece… ¿Consideras que podrías ser un terapeuta del humor? ¿Cómo te sientes sabiendo que eres parte de una increíble magia saludable?
Ahora mismo abrumado jajajajaja…Lo cierto es que es un verdadero placer cuando alguien te dice: Cómo me río contigo.
Ya sea viendo una película en el cine, una serie de humor en la televisión, disfrutando de una entretenida obra de teatro o escuchando un monólogo durante una actuación, los actores logran trasladar por un momento al espectador a un mundo donde evadirse de sus problemas. ¿Crees que los actores y los humoristas deberíais de estar aún más valorados?
Lo que creo es que hay mucho talento desperdiciado por ahí, actrices y actores que hoy por hoy no pueden demostrar lo que valen. Este mundillo nuestro es muy bonito pero muy, muy cabrón.
¿Crees que actualmente se corre el peligro de limitar la libertad de expresión al humor, dado que comentarios publicados, que antes hacían gracia, ahora tienden a ser rápidamente censurados?
Manteniéndose dentro de unos márgenes lógicos, ¿se puede poner límite al humor?
Rotundamente NO. Creo sinceramente que el problema está en el receptor, no en el emisor. El humor es tan amplio, lo que a ti te hace gracia es probable que a mí no me la haga. La frontera entre la libertad de expresión y la censura es muy delgada y ahora mismo estamos rozando el fascismo…”Esto se puede decir, esto otro no…esto hace gracia, esto otro no” ¡Venga ya! Yo siempre me he considerado un bufón y ejerzo de ello, por lo tanto seguiré metiéndome con los poderosos o con las injusticias aunque no les guste, eso sí, en clave de humor, si no se ríen es su problema, no el mío. Como explicaba muy bien David Broncano en un monólogo: “Siempre habrá alguien a quien ofendas con algún chiste. Van dos y se cae el de en medio. Es que mi padre iba en medio y se murió”… Pues si no te gusta te vas. Si no te gusta mi canción…no compres el disco ¿el humor tiene que ser políticamente correcto? NO, el humor tiene que conectar con el público, puedes reírte, escandalizarte o llorar…lo que no puedes hacer es mirar el reloj cada dos minutos. En ese caso yo lo estoy haciendo mal o tú no conectas con el espectáculo. Levántate y vete. Agur.
Actores en el mundo de la política y políticos haciendo humor, ¿puede ser que el mundo se esté volviendo loco?
Rajoy es insuperable como humorista. Como político deja mucho que desear.
La comedia de contrastes “Allí Abajo” se ha convertido en un fenómeno de audiencia que reúne a toda la familia frente a la televisión, gracias a buenos guiones y a un fantástico elenco de actores, pero ¿cómo ves el choque de los diferentes tipos de humor entre en norte y el sur?
No veo ningún choque, es más una simbiosis ¡Nos lo pasamos muy bien! Jajaja… En el sur nos tratan con mucho cariño y les hacemos gracia. A mí me encanta el humor de mis compañe@s sureños, son buenísimos. Creo que la clave de la serie es que jugamos con un humor muy blanco, eso hace que pueda sentarse toda la familia a verla, tanto el abuelo, como la hija o el nieto…
Gracias a esta serie, podemos ver reunida, a una gran plantilla de humoristas, ¿es complicado trabajar junto a gente tan divertida a la hora de realizar tomas limpias? ¿Hacéis “gamberradas” en los previos?
Como te he dicho nos lo pasamos muy bien, pienso que es fundamental en la comedia, si tú te lo pasas bien…eso se trasmite.
Hacemos menos tomas falsas de las que parece, en realidad, rodando, llevamos un ritmo considerable, vamos que no podemos perder mucho el tiempo. Eso sí…nos reímos mucho jajaja…
En un mundo triste y melancólico, ¿porque es tan difícil premiar al humor y todos los premios van dirigidos a la interpretación de personajes dramáticos?
Me alegra que me hagas esta pregunta jajaja… me he puesto serio, no, no…
Creo que los premios (normalmente) se los dan a los trabajos dramáticos por compensar lo mal que se pasa haciéndolos, tienes que llorar mucho jajaja… No, no es cierto, personalmente disfruto interpretando dramáticos tanto como personajes cómicos. Pero sí, parece que cuesta más premiar al humor ¡y es más difícil, coño!
Ahora que eres más conocido gracias a tu papel en la serie “Allí Abajo”, ¿hasta qué punto se puede llegar a desconectar?, ¿se ha de ser humorista 24 horas?
A menudo se dice que «es imposible tomarse las cosas con humor cada día». ¿Crees que el humor es imprescindible para ser feliz?
El humor es imprescindible para ser feliz: Sí. Pero en este mundo es tan difícil ser feliz, hay mucha gente infeliz, y con razón, que lo tiene muy complicado para vivir con humor. Soy un privilegiado.
En varias ocasiones has reconocido el agradecimiento al gran actor Karra ELEJALDE ¿Puedes contarnos alguna anécdota curiosa relacionada con tú profesión?
Karra es un monstruo de la interpretación, pero además tiene un corazón enorme, es mi amigo, mi hermano mayor, le quiero un huevo y le tengo mucho que agradecer…de mayor quiero ser como él. Yo empezaba a hacer teatro y tras una representación, Karra irrumpió en el camerino como un torbellino y, señalándome con el dedo, me dijo: “Tú eres como yo y te vas a ganar la vida con esto”. Mi primera película la hice gracias a él.