
PRINCIPALES CAUSAS del SUICIDIO
El suicidio es la primera causa de muerte no natural en España y sin embargo apenas se invierte y dedican medios en salud mental
En una sociedad donde cada vez hay más personas que necesitan ayuda, es muy importante romper la barrera tabú relativizando esta enfermedad, para que aquellos que se encuentren en algún momento en estas situaciones y que se les pase por la cabeza la idea de querer quitarse la vida o que tienen gestos suicidas, pidan ayuda, para que su familiares o amigos puedan llevarles a un profesional que identifique bien la enfermedad.
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Alrededor de la mitad de las personas que llegan a quitarse la vida, han sufrido depresión, un trastorno anímico y emocional que causa un continuo estado de tristeza, sensación de vacío o perdida de interés por disfrutar de las actividades cotidianas. Sin embargo, aunque la depresión es una de las principales causas de discapacidad y que puede encontrarse en adultos, en aproximadamente el 5% de la población mundial (más de 800.000 personas al año), no es un tema de salud pública del que se habla y sigue siendo un tabú social.
En 2020, acentuado por la pandemia del Covid, en España el número de fallecimientos por suicidio fue el mayor de la historia desde que se contabiliza, unos 10 diarios, acercándose a las 4.000 personas, casi 3 veces más que los 1.370 fallecimientos por accidentes de tráfico.
El suicidio es la segunda causa principal de fallecimiento en jóvenes de entre 15 y 29 años.
Aunque lo intentan más las mujeres, que sufren depresiones con mayor frecuencia, es más elevado el número de hombres que se suicida, casi el doble.
Asturias es la comunidad que registra los datos más altos, mientras que Madrid recoge los más bajos.
Los factores sociales y económicos incrementan las tasas de suicidios, y también influyen en asistencias y tratamientos ya que ante una Seguridad Social colapsada, el que puede permitírselo acude a la Sanidad Privada.
También es importan destacar el elevado índice de fallecimientos en ámbitos rurales, posiblemente acentuados por una mayor dificultad para expresar emociones además de existir una mayor soledad e impulsividad.
Principales causas de SUICIDIO:
El 90% de las causas tiene detrás algún tipo de trastorno mental.
1. La DEPRESIÓN
Es la principal de las causas. En muchos de los casos genera un elevado estado de fatiga mental al enfermo, que no puede gestionar correctamente las emociones y puede reconocerse cuando una persona pasa de un comportamiento activo a un estado solitario y silencioso.
La persona no se ve útil o necesario y entra en un túnel de pesimismo donde piensa que la vida no merece la pena, encontrando el suicidio como la salida más rápida.
2. Las ENFERMEDADES MENTALES
Hay enfermedades psicológicas complejas como el Trastorno Bipolar, los Trastornos de Personalidad o la Esquizofrenia, que pueden provocar que la mente del enfermo desfase a estados de realidad proyectados en su cerebro, encontrado el suicidio como escape a esa realidad alternativa.
3. El ESTRÉS
A diferencia del comportamiento de una persona que sufre depresión y que se apaga lentamente, la que sufre estrés, tiende a enfrentarse a demasiadas situaciones que terminan sobrepasándole, demasiada carga de trabajo, intentar encajar en un grupo social sin resultados, acumular en exceso problemas emocionales o familiares, que terminan haciéndole “estallar”.
4. DROGAS y ALCOHOL
El consumo de alcohol, drogas o sustancias psicoactivas generan un estado de liberación personal, creando una elevada adicción progresiva. Este estado de dependencia se convierte en parte de la vida del enfermo, hasta que el deseo de salir de este cautiverio lo lleva a buscar una solución en el suicidio.
Este tipo de pacientes pueden reconocerse al presentar signos de falta de sueño o desconcentración.
Factores de riesgo:
1. La TENTATIVA de SUICIDIO
Sin duda, es el principal, ya que la persona que lo ha intentado una vez, es muy probable que vuelva a intentarlo, sobre todo en la ventana de los 3 a los 6 meses posteriores.
Cuantas más veces lo haya intentado, mayor será la probabilidad de volver a repetirlo.
En este caso nunca hay que relativizarlo y hay que poner a la persona inmediatamente bajo la supervisión de un especialista, además de tenerle vigilado sin que tampoco sea objeto de presión constante.
2. Más FRECUENTE en HOMBRES
El número de hombres casi duplica al de mujeres que se suicidan.
3. Tener una ENFERMEDAD MENTAL DIAGNOSTICADA
Sobre todo la depresión.
4. CONSUMO de SUSTANCIAS
El consumo de alcohol y drogas como la marihuana o el LSD.
5. La IMPULSIVIDAD
El suicidio es el final de un proceso que va progresando en intensidad, desde que aparecen los deseos de morir, la idealización del acto, la planificación y finalmente el intento suicida.
En muchos de los casos se puede prevenir el suicido interrumpiéndolo en su fase progresiva, bien por solicitar la ayuda de un profesional o por el miedo a llegar al final del proceso.
Las personas impulsivas tienden a acortar este proceso, incluso pueden pasar por todo el proceso de forma inmediata.
6. La SOLEDAD
Estar soltero/a o divorciado/a.
7. La SITUACIÓN SOCIAL y/o ECONÓMICA
Tener un bajo nivel educativo, una orientación sexual diferente, sufrir violencia de género, tener pocos recursos económicos o perder el trabajo siendo mayor de los 50 años.
En jóvenes, uno de los perfiles más frecuentes son los fracasos afectivos o la falta de autoestima, ambos no gestionados correctamente a esas edades en las que todo parece un mundo, o un vivir en una familia desestructurada.
En adultos, uno de los perfiles más frecuentes es un hombre viudo o divorciado que consume sustancias, que vive solo y que además, sufre una situación de paro o que está jubilado.

Señales de advertencia
Estas son algunas de las señales que pueden alertar de un posible intento de suicidio:
Cuando se verbalizan amenazas directas de quitarse la vida o de provocarse daños, o a través de dibujos, búsqueda de información en la red sobre métodos de suicidio…
Cuando adquiere alguna arma blanca o arma de fuego, o acumula medicamentos (ansiolíticos, antidepresivos…)
Cuando se descubre un plan de suicidio. Cuanto más detallado, mayor será el impulso.
Cuando la persona presenta claros síntomas de depresión, como falta de interés por actividades con las que antes disfrutaba, hay cambio de personalidad o de humor, o altibajos de euforia.
Cuando se muestra dejadez y se descuida la apariencia o higiene.
Cuando pone al día documentos, como seguro de vida o testamento.
Cuando se despide de personas queridas y les regala pertenencias importantes.
Prevención y Detección
Es muy importante estar pendientes de personas cuyo comportamiento nos lleve a indicar que puedan tener algún comportamiento depresivo o suicida, y detectar las alarmas a tiempo para poder acompañarles a visitar a un profesional ante el cual el paciente se sienta cómodo y libere su ansiedad o su angustia.
Muchas veces podemos observar muestras de tentativas de suicidio que nos alerten.
La carrera de Psicología no incluye formación para tratar problemas de comportamiento suicidas, pero la correcta ayuda de un especialista tiene gran efectividad y ha logrado curar a personas con un grave cuadro depresivo.
Aún así hace falta invertir para que aumente el servicio profesional de atención en salud mental.
Hay que lograr dar gran visibilidad a este problema, para conocer su dimensión y se diseñen estrategias de prevención.
En memoria de Edu